En este post os explicaremos cómo funciona una tarjeta revolving, pero antes debemos tener claro en qué consiste este tipo de tarjetas.
¿Qué es una tarjeta abusiva?
Para saber cómo funciona una tarjeta revolving, tenemos que tener claro qué es.
Se trata de un tipo especial de tarjeta de crédito, cuya característica principal es que nos va a permitir disponer de crédito en efectivo, así como hacer compras, pagando el importe en cómodas cuotas.
Muy bonito hasta ahora, sí, pero nadie da “duros por pesetas”. Una de las características que destacan en cómo funciona una tarjeta revolving son sus elevados intereses, los cuales van a incrementar los costos del beneficio.
Resumiendo, una tarjeta revolving nos va a permitir fraccionar y/o aplazar los pagos de nuestro consumo, pero a cambio, se irá incrementando su costo a través del cobro de elevados intereses que, muchas veces, desconocemos.
Otra característica de este tipo de tarjetas, también conocidas como abusivas, es que tiene un límite de crédito que puedes utilizar, aunque no tengas dinero en la cuenta asociada a la misma.
¿Cómo funciona una tarjeta revolving?
Respondiendo a la cuestión de cómo funcionan una tarjeta revolving decir que lo hace a través de un sistema de crédito al consumo, crédito independiente del nivel de liquidez que se tenga en la cuenta asociada.
Consecuentemente, el uso de estas tarjetas está limitado únicamente por el saldo disponible del crédito otorgado por el banco para ella.
Con los pagos mensuales o amortizaciones, se recupera el saldo disponible inicial, pudiendo volver a utilizarla.
Uno de los reclamos de las tarjetas revolving es su supuesta facilidad para devolver el crédito con mensualidades muy bajas.
En este caso, si contratamos una cuota mensual baja, probablemente que ni si quiera lleguemos a cubrir los intereses, que se suman y financian con el resto de deuda, a pesar de satisfacer las cuotas, sigue creciendo corriendo el riesgo de encadenarse a una deuda indefinida, que nuca se termina de pagar.
Por eso es muy importante calcular adecuadamente las cuotas, evitando así que la deuda crezca de tal manera que no podamos cubrirla con esta forma de pago.